Tampoco en este tramo caminarás conmigo.
De nuevo son mis manos las que toman las riendas
y busco, siempre sola, salir del laberinto.
Si conduje mi vida por la sed de tus besos,
si cultivé dos flores sin sol y sin abono,
si tu silencio tuve cuando pedía risa,
si goberné la barca, a pesar de tu rumbo,
si tuve la certeza de amarte, cuando amaba,
igual que estoy segura de que ya no te quiero,
no le cambies el nombre a esto que nos ata.
Me está arañando el alma saberte mi enemigo.
No matarás tu sed ni aún quitándome el agua.
A ninguno le ayuda caminar contra el viento.
Y no sabes la pena que me da cuando veo
que ni el último tramo podrás andar conmigo.
De nuevo son mis manos las que toman las riendas
y busco, siempre sola, salir del laberinto.
Si conduje mi vida por la sed de tus besos,
si cultivé dos flores sin sol y sin abono,
si tu silencio tuve cuando pedía risa,
si goberné la barca, a pesar de tu rumbo,
si tuve la certeza de amarte, cuando amaba,
igual que estoy segura de que ya no te quiero,
no le cambies el nombre a esto que nos ata.
Me está arañando el alma saberte mi enemigo.
No matarás tu sed ni aún quitándome el agua.
A ninguno le ayuda caminar contra el viento.
Y no sabes la pena que me da cuando veo
que ni el último tramo podrás andar conmigo.
.
Amiga, estas cosas "del desamor" son tan estremecedoras como bellisimas en su forma... Bello poema pero terribles palabras...
ResponderEliminarUn abrazo, amiga
Uno puede estar haciéndolo toda la vida, sin darse cuenta de determinadas cosas, pero cuando uno comienza a reparar en ello, a planteárselo... En fin...
ResponderEliminarCoincido con Antiqua: Bello poema, pero terribles palabras
Un besillo
Sara,
ResponderEliminarqué fuerza interior tiene quien haya escrito el poema, dolor o desengaño pero fuerza y fuerza...
me ha gustado mucho.
besos.
Antiqva, cuando llega el desamor y llega la certeza de ese hecho, es como si el mundo se cayera, por dentro y por fuera. Y claro, eso es terrible.
ResponderEliminarAsí es, Bacdiras. De repente, una sola gota más basta para colmar un vaso lleno de tristeza. Entonces, ya solo queda vaciar ese vaso.
Alfaro, el poema es mío. Cuando no pongo el autor, es q es mío. Celebro mucho q te haya gustado. Hay veces q solo se puede luchar contra el veneno sacándolo fuera.
Besos para los tres.
Mi particular cupido también pienso que está malherido.
ResponderEliminarNunca se sabe cuando es el último tramo, son complicadas las cosas del amor y el desamor, a veces se extingue sin remedio, otras puede resurgir, unos se van y otros pueden llegar. Saldrás del laberinto.
Precioso poema, aunque triste.
Un beso, Sara.
Irene, ese poema lo escribí hace algún tiempo. Entonces, en esa época de dolor y desamor, de rupturas y heridas, escribir era mi mejor terapia. Salí del laberinto, al cerrar la puerta dejé atrás muchas cosas y no todas eran malas. Por eso me gusta poner en este blog poemas de todas las sensaciones, de todos los sentimientos, porq sin dolor nunca podríamos saborear la felicidad en todo su esplendor, como es necesaria la noche para disfrutar el día, o la muerte para derrochar la vida. Yo salí, y tú seguro q también resolverás las incógnitas de tu corazón, porq de todos estos revuelos se sale más fuerte y más sabia.
ResponderEliminarUn enorme beso.
¡Sara! ¿El poema es tuyo? ¿Tenés influencias de Gabriela Mistral? ¡Me hiciste acordar tanto a ella! ¡Es precioso1
ResponderEliminares malo caminar sólo en la senda del amor. Besos.
ResponderEliminarUna ET, hola. Me encanta q te guste mi poema. Seguro q tengo influencias de todos los poetas q me gustan, porq las cosas q calan hondo se suelen quedar, para siempre, como posos o sedimentos indelebles.
ResponderEliminarUn beso.
Sí, Fernando, es malo... pero es peor caminar al lado de alguien, sintiendo fuerte esa soledad.
ResponderEliminarUn besico.
Hay que saber cuando se acaba una etapa para así poder comenzar la siguiente con energía y entusiasmo. No es fácil, pero sí necesario.
ResponderEliminarQué envidia me das al poder expresar todos tus sentimientos como lo haces, con tan bellos poemas.
Al menos tengo el placer de disfrutarlos.
Un beso.
Hola, Pedro. No se suele empezar la etapa siguiente a una ruptura con energía ni entusiasmo; más bien es a pura fuerza, desde las vísceras y por simple supervivencia. Pero se supera, se sigue adelante y se vuelve a sonreír.
ResponderEliminarUn besico.
''Hay veces q solo se puede luchar contra el veneno sacándolo fuera''.
ResponderEliminarCuánta razón tienes. Curioso que los blogs también sirvan como terapia ;)
Unos versos muy bien escritos, tal vez por la sinceridad que se desprende de ellos...
Un saludo! ;P
Deja de mirar hacia atrás; solo verás sombras...
ResponderEliminarMira el amanecer entre nubes de colores,
siente la brisa fresca del viento,
regalando el olor de las rosas en otoño...
Y cuando las gotas de lluvia acaricien tus ojos,
mírate en un charco,
para ver como sonríe, la flor más bella en mitad del otoño.
Un besín
Precioso Sara, de verdad.
ResponderEliminarTransmite tántas sensaciones...
Un beso enorme.
Q bien me ha sentado ahora este yogur!
ResponderEliminarGracias por tu visita, un besico.
Santa, bienvenid@. Estás en tu casa.
ResponderEliminarMe gustan los charcos desde niña, me metía y me meto en todos los q puedo. Y son un estupendo espejo.
Un beso.
Irene... tu si q transmites, mi niña. Tu blog me parece una radiografía de tu alma.
Un besico.
Para el desamor un día de buena fiesta, dos de resaca, tres de lluvia, cuatro de tristeza, cinco de miedo, seis de incertidumbre, siete de desaliento y a la semana siguiente un rayo de sol y una nueva esperanza, joven skywalker.
ResponderEliminarHasta el infinito y más allá
Conseguir algo bello con palabras tan fuertes como duras es todo un buen hacer literario y lo has conseguido.
ResponderEliminarEnhorabuena por ello!
un beso
Masakoy, tu fórmula para la cura del desamor parece muy eficaz, habrá q probarla si hay una próxima vez...
ResponderEliminarFrabisa, gracias por ese comentario, gran cocinera.
Besicos para los dos.
Cultivar flores sin sol y sin abono, difícil...pero seguro tuvieron con el agua que destilaba amor suficiente para mantenerles vivas ¿pero cuánto tiempo?... son de esas cosas que parecen imposibles, pero son reales y tristes, porque habla del amor, entrega y pasión de solo uno cuando debieran de ser dos.
ResponderEliminarUn abrazo
Quizás como dice el nombre de tu casa el elixir para olvidar sea el recordar, ¿o no?
ResponderEliminar¿Olvidamos aquello que deberíamos recordar?
¿Recordamos lo que seria necesario olvidar?
Quizás el mejor elixir para olvidar sea la memoria, que sabiamente es selectiva y nos hace recordar infinidad de veces lo que nunca se debe olvidar.
Besos
Cynthia, las dos flores q cultivé, sola, tienen nombre y apellidos... y tú conoces bien a una de ellas. Creo q no lo hice mal. Pero fué difícil, aún lo es.
ResponderEliminarUn beso.
Hola, Petita. Q bien q tu ordenata esté mejor!
ResponderEliminarLa memoria tiene resortes caprichosos y arbitrarios; a veces lo q se olvida y lo q se recuerda está tan mezclado q no sabes bien q deseas q ocurra. O, en medio del dolor más grande, queda una islita de belleza, de amor, a cuyo olvido no te quieres someter, y entonces conservas todo el paquete... No sé. Pero a veces quisiera tener una botella de elixir para olvidar, y te aseguro q, más de una noche, me tomaría un trago.
Un beso.
Sara: Malinterpreté lo que leí...
ResponderEliminarDi otro sentido. El inconsciente hizo de las suyas con esas asociaciones escurridizas.
Es verdad. Hiciste un precioso trabajo, me consta y lo celebro gratamente. Un abrazo.
No, Cynthia, no interpretaste mal; solo le diste otro significado q tambien era acertado. Lo q pasa es q yo lo escribí con otra intención. Pero, lo mejor de escribir, es q quien lo lee hace el texto suyo, le da otra dimensión, lo completa, lo enriquece.
ResponderEliminarUn besico.