viernes, 28 de noviembre de 2008

Soy



Soy el que sabe que no es menos vano
que el vano observador que en el espejo
de silencio y cristal sigue el reflejo
o el cuerpo (da lo mismo) del hermano.
Soy, tácitos amigos, el que sabe
que no hay otra venganza que el olvido
ni otro perdón. Un dios ha concedido
al odio humano esta curiosa llave.
Soy el que pese a tan ilustres modos
de errar, no ha descifrado el laberinto
singular y plural, arduo y distinto,
del tiempo, que es uno y es de todos.
Soy el que es nadie, el que no fue una espada
en la guerra. Soy eco, olvido, nada.

Jorge Luis Borges

lunes, 24 de noviembre de 2008

Hombre pequeñito




Hombre pequeñito, hombre pequeñito,
suelta tu canario, que quiere volar...
Yo soy el canario, hombre pequeñito,
déjame saltar.

Estuve en tu jaula, hombre pequeñito,
hombre pequeñito que jaula me das.
Digo pequeñito porque no me entiendes,
ni me entenderás.

Tampoco te entiendo, pero mientras tanto
ábreme la jaula que quiero escapar;
hombre pequeñito, te amé media hora,
no me pidas más.



Alfonsina Storni

domingo, 16 de noviembre de 2008

La voz a ti debida




La forma de querer tú

es dejarme que te quiera.

El sí con que te me rindes

es el silencio. Tus besos

son ofrecerme los labios

para que los bese yo.

Jamás palabras, abrazos,

me dirán que tú existías,

que me quisiste: jamás.

Me lo dicen hojas blancas,

mapas, augurios, teléfonos;

tú, no.

Y estoy abrazado a ti

sin preguntarte, de miedo

a que no sea verdad

que tú vives y me quieres.

Y estoy abrazado a ti

sin mirar y sin tocarte.

No vaya a ser que descubras

con preguntas, con caricias,

esa soledad inmensa

de quererte sólo yo.



Pedro Salinas


miércoles, 5 de noviembre de 2008

Para Diego



Viene siempre conmigo
metido en un bolsillo
que tengo yo en el alma.
Le llevo a todas partes
y aunque a veces me duela,
muchas más me da vida.
Me desvela en la noche
ese sendero incierto
que parece empeñado
en recorrer ya mismo,
me espanta su inocencia
porque sé que es muy frágil
detrás de esa apariencia
del que se come el mundo.
Siempre viene conmigo
y ójala yo pudiera
quebrar cada barrera
que le ponga el destino,
pero sé que no puedo.
Me he de quedar a un lado
sabiendo que él ya sabe
que es suyo mi camino.
Así que, día a día,
desde que le conozco,
cargo su dulce peso
dentro de mi bolsillo.
Y no me cuesta nada,
aunque me cueste mucho,
porque es como un regalo
llevar siempre a mi hijo.



Para Diego (otro mas),
en su cumpleaños.

domingo, 2 de noviembre de 2008

Noviembre


Otro noviembre empieza.

Mi contrario dice q ahora el tiempo pasa mucho más deprisa, q parece q los días y las estaciones volaran. A mí siempre se me ha pasado el tiempo zumbando, por lo q ya no me parace novedoso el correcorre de un día tras otro, q no me doy cuenta y ya estoy en Navidad, por ejemplo, y no me doy cuenta y ya es verano. Tampoco es tan importante, creo yo. Lo q de verdad importa es llenar de vida cada minuto, cada segundo de ese tiempo q nos han regalado. Lo q de verdad importa es saber q este concreto amanecer nunca se repetirá, q esto q ahora mismo escribo no volverá a ser escrito del mismo modo ni con la misma intensidad, porq el día de hoy es único e irrepetible. Tomar conciencia de la vida, de la nuestra, de la de los otros, es lo q nos permite disfrutarla. Y si soy feliz ahora, genial. Y si me duele ahora, genial también, porq estoy viva y puedo notar el dolor. La vida está ahí, en la lluvia, en el cierzo de mi ciudad, en este frío q pela de hoy, en los árboles q ya se han desnudado, en la gente q corre bajo sus paraguas y en mí, q puedo verlo. Por eso hoy me apetece reivindicar la vida, la Vida, esto q nos pasa constantemente y nos parece tedioso, pero q es, en realidad, lo único q tenemos.

Enhorabuena. Estamos vivos.