Bajo el cielo estrellado caminan por la playa
como si no existiera mas ley que la sonrisa.
El mar los acaricia, su cómplice mirada
los aleja de un mundo que no les pertenece.
Pasean por la playa, y esa playa infinita
es un hogar sin tiempo ni nubes de tormenta.
Se conocen apenas, se miran, se detienen,
se miden uno al otro desde el fondo del alma
y todas las estrellas se asoman a sus ojos,
de yerbabuena y menta se les llenan las manos
y la voz se les quiebra en un hondo suspiro
y la luna los cubre con su manto de plata.
como si no existiera mas ley que la sonrisa.
El mar los acaricia, su cómplice mirada
los aleja de un mundo que no les pertenece.
Pasean por la playa, y esa playa infinita
es un hogar sin tiempo ni nubes de tormenta.
Se conocen apenas, se miran, se detienen,
se miden uno al otro desde el fondo del alma
y todas las estrellas se asoman a sus ojos,
de yerbabuena y menta se les llenan las manos
y la voz se les quiebra en un hondo suspiro
y la luna los cubre con su manto de plata.
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Uauuuuuuuuuu, qué romántico.
ResponderEliminarRealmente hablar de amor y más si es con tan buen hacer como el tuyo, es un soplo de aire fresco.
un beso
Un hogar sin ruidos y tormentas.
ResponderEliminarMe ha encantado esa frase.
Besos pestañica!!!
me ha parecido dulce y bonito seguire leyendo tu blog
ResponderEliminarabrazotes
QUé maravilla poder disfrutar del mar y de la persona amada al mismo tiempo y sentir todo lo que escribes aquí. Ayyy, alguna vez me veré yo en ese situación? No lo pensaré mucho, que no me quiero deprimir, jeje.
ResponderEliminarBesos.
Mirarse desde el fondo del alma no es nada fácil...
ResponderEliminar¡Que envidia!
Sitos y salud
me encanta la serenidad que transmite tu poema. Un saludo.
ResponderEliminarParece el dulce juego de un amor que comienza, muy bonito, suave y sereno.
ResponderEliminarBesinos.
¡¡¡Que lindo!!!
ResponderEliminarBesos
muy bonito lo q has escrito amiga Sara !!!
ResponderEliminarun placer venir x acà
un abrazo
Fede Hammelinn
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NOCHE Y CRUZ (fragmentos)
Cuando persigue el hombre sin cesar al hombre
la misma trampa sirve para el uno y el otro
la misma ausente mano
hace cortar el cuello del lobo y de la tórtola.
Y la rutina ordena
con más rigor que la pasión difunta.
Cuando persigue el hombre en cada sitio al hombre,
a los unos da muertes que no serían la suya,
al uno quita el alma, al otro sepultura.
Una metralla ciega hasta en los muertos cava
y la mano de un niño cuelga de frescos olmos.
En súbito tumulto
se incendia la noche desde adentro.
Se reduce el antiguo lugar para la sombra,
como muros y troncos se parten las tinieblas.
Desaparecen ellas, las casas y los bosques.
Susana Soca (Montevideo,19 de julio de 1906 - Muere en accidente aéreo en Río de Janeiro,11 de enero de 1959)
http://socasabat.blogspot.com/
Ideal decorado para quienes se regalan su primer aliento..
ResponderEliminarNo debería existir nada más. Y por favor, paren los relojes.
ResponderEliminarBesos.
Hola, Frabisa. Quise traer un poco de brisa marina y cálida... ;)
ResponderEliminarBesicos, wapa.
Fete, ójala todos tuviéramos un sitio así. sin tiempo ni tormentas.
ResponderEliminarBesicos.
Hola, Pau. Bienvenido, estás en tu casa.
ResponderEliminarUn beso.
JotaEfe, seguro q sí. En algún lugar, esa persona piensa lo mismo q tu y te está esperando. Solo es cuestión de tiempo q os encontréis.
ResponderEliminarBesicos.
Es fácil mirarse así, Genin, cuando se ama.
ResponderEliminarUn beso.
Gracias, Eva. Era un momento pleno y sereno, en efecto.
ResponderEliminarUn besico.
Fabia, un amor tan reciente q aún no había comenzado, salvo en la imaginación de ambos.
ResponderEliminarUn besico.
Susy, me alegro de q te guste.
ResponderEliminarUn besico.
Fede, tu visita es siempre un doble placer: tu comentario y el verso q me regalas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Así es, Delgaducho. Aunq, en realidad, el sitio es lo de menos...
ResponderEliminarBesicos.
Amiga, de ese bello poema están a punto de brotar chispazos inmensos...
ResponderEliminarBello de verdad, amiga
Antifaz, q paren los relojes mientras la gente se ama.
ResponderEliminarBesicos.
Gracias, Antiqva.
ResponderEliminarUn beso grande.
una estampa digna de ser vivida. Besos.
ResponderEliminarQue tendrá el mar que nos hipnotiza y si estás acompañado de la persona a la que amas... ya ni te cuento, un besito.
ResponderEliminarAmoooor, que ganas de ir a la playa..
ResponderEliminarLa playa, el mar, creo que nos devuelve el color con que miramos, si estamos triste es de una tristeza infinita y al revés si nos sentimos felices.
ResponderEliminarUn abrazo.
Fernando, ójala todos tengamos la oportunidad de vivir algo así.
ResponderEliminarUn besico.
ainnnnsss qué bonito
ResponderEliminarDavid, eso me pregunto yo. Qué tendrá el mar, q es capaz de atraparme así, tan lejos de él...
ResponderEliminarUn besico.
Hola, Alf, bienvenido. Estás en tu casa.
ResponderEliminarUn beso.
Adolfo, espero q ya estés bueno.
ResponderEliminarUn beso, cuídate.
Estamos de acuerdo, Alfaro. El mar es un gran espejo en el q nos reflejamos.
ResponderEliminarUn besico.
S., me alegro de q te guste.
ResponderEliminarUn beso, preciosa.
Quién no viviera un momento como ese no sabe lo que es estar enamorado.
ResponderEliminarSaludos.
Así es, Goathe.
ResponderEliminarBesicos.
Aunque ya quedan pocos románticos por este mundo, mi me siguen estos textos ;)
ResponderEliminarBesos
Me alegro, Dani. Cuando muera el romanticismo, se apagará el sol.
ResponderEliminarUn besico, bienvenido.