En su piel habitan todas las tormentas
y tiene
en los ojos estrellas caídas.
El tiempo vivido a veces se pierde
en algún camino de un bosque de acacias.
La luna es enorme, igual que su miedo.
Chocan los planetas y nacen galaxias,
duermen las semillas que parecen muertas
y las noches tienen un aroma a rosas.
No cabe una gota más en esa lluvia
ni más alegría por estar viviendo
el dulce regalo de un día añadido.
Se rompen las horas con fragor de espuma
y será tan fuerte como siempre ha sido.
Sara Royo
Felicidades, y gracias por hacernos cada día un poco mejor
ResponderEliminarMuchísimas gracias por estar siempre ahi, por leerme, por comentar...
EliminarBesicos de colores.
:)
ResponderEliminarBesos y salud
Besos y salud para ti tambien, Genín. :)
ResponderEliminarSarii cómo me gusta leerte! :)
ResponderEliminarY a mí q me leas. Y leerte yo. Wapa.
ResponderEliminarBesazos.