Se termina este año. Recuerdo el difícil verano (el calor, los miedos, la enfermedad y pérdida de Zelda...), las cosas cotidianas, la belleza del otoño. Gente que ha entrado a mi vida, gente que ha salido de ella. Así vamos escribiendo las páginas de la existencia, con renglones temblorosos, emborronados, a veces; con pulso firme y glorioso, otras.
Apenas unas horas y tendremos delante un cuaderno en blanco, donde iremos anotando, inexorablemente, risas y lágrimas, amor y miedo, luces y sombras. Todo está bien. Al final, esto se reduce a la intención y la esperanza de ser felices, de tener salud y alegría. Eso es lo que le pido al nuevo año. Salud y alegría para los que amo, y para mi.
Que el 2023 os colme, nos colme, de todas las bendiciones. Feliz año nuevo.